domingo, 2 de octubre de 2016

LA CRESTA DE ALBA

Dicen que la "Cresta de los quince gendarmes" o "Cresta del Alba" es junto con la "Salenques-Tempestades", una de las crestas más difíciles de la zona de los Malditos. Pero también dicen que es de las más bonitas...
Con un recorrido de algo más de 1 kilómetro de longitud, una dificultad  D, IV+ y un trazado muy aéreo, a nosotros nos pareció una actividad preciosa, con un ambiente espectacular.


Llegamos a Benasque el viernes 26 de agosto. Habíamos reservado habitación en el Hotel de los Baños del Hospital.


El hotel nos pareció un punto estratégico excepcional para esta actividad si se va a realizar la aproximación desde los Lagos de Alba, a no ser que tengamos pensado vivaquear a medio camino...


Eso sí, que no nos engañe el precio de la habitación.
Os vais a encontrar con unas instalaciones que ya necesitan una buena reforma...


En los interminables pasillos parece que van a aparecer en cualquier momento las niñas de "El resplandor"...


Salimos del hotel el sábado sobre las 5.30 de la mañana.
La primera subida por la Canal de Turonet ya nos hace sudar, pero en cuanto llegamos a la Pleta de Alba y aparece frente a nosotros nuestro objetivo, se nos pasan todos los males.



 Desde la Pleta se llega cómodamente al lago inferior de Alba (2.255m) 


Lo bordeamos por la izquierda, recreándonos en los juegos que hace el agua...




Vamos ganando altura por canales pedregosas dirigiéndonos hacia la brecha por aproximación evidente.


 Localizamos el inicio de la cresta, la Brecha de Alba (2.660 m)


y la recorremos con la mirada imaginándonos cabalgando sobre ella...


y ya nos vemos haciendo cumbre en el Pico de Alba.



En tres horas de aproximación alcanzamos la brecha.
Sería una locura intentar reseñar la totalidad de la cresta. Si alguien quiere una reseña minuciosa la tiene en el libro de Pako Sánchez, "Crestas Pirenaicas"
Yo os dejo aquí algunas de las estampas que pudimos recoger durante la escalada.


Justo antes de llegar a las dos fisuras paralelas (V-) que dan acceso a la cara norte del Gendarme 18.


Vivac después del Gendarme 18.












Tras el Gendarme 17 se suceden una serie de gendarmes más modestos, pero con mucho ambiente. Hay que enlazarlos siguiendo el filo de la cresta, cada vez más aérea.


Al pie del Gendarme 15.



Después de bajar del Gendarme 9 con un rápel de 15 metros, nos encontramos ante la llamada Gran Torre, donde nos encontramos los pasos más difíciles de toda la cresta. Nosotros realizamos todo el recorrido en ensamble, colocando seguros intermedios, pero quizás éste es el único sitio en el que la reseña aconseja hacer un largo de cuerda.


Cumbre del Gendarme 6.











El Gendarme 2, como tiene más de 3.000 metros sí tiene nombre. Es el Gendarme de Alba. Desde aquí en un momento estamos en el Pico de Alba (3.110 m)


Para bajar, hay que dirigirse hacia los pedregales que descienden directamente al valle de Alba, abandonando la arista a la altura de una horcada (2.936 m).


El descenso se hace muy largo y pesado. Tardaremos lo mismo que hemos tardado en la aproximación.
Que la monotonía del descenso no os impida levantar los ojos del suelo, porque si no lo hacéis, os perderéis el corazón que la Cresta de Alba tiene para vosotros de regalo...


Maravilloso...
Si alguien más lo ha visto, por favor, me gustaría saberlo...

Hicimos una parada en los Lagos de Alba antes de afrontar la última parte de la bajada hasta los Baños del Hospital, donde llegas andando ya como chiquito de la calzada...
Esta parte de la bajada es muy empinada y con tierra suelta, así que unos bastones nos vienen aquí al pelo.
Además de los bastones, utilizamos el siguiente material: 
Camalot azul, amarillo, rojo, tres cintas largas, dos anillos de cintas, alien amarillo y dos cuerdas de 15 metros.
Aunque cansados, llegamos con tiempo de sobra para darnos un buen homenaje en Benasque. Al día siguiente, después de un tranquilo paseo por el pueblo, volvimos para Madrid. 
Tardé en quitarme las imágenes de la Cresta de Alba de la cabeza, no sé si porque las agujetas de la bajada me duraron casi toda la semana...